lunes, 31 de mayo de 2010

Los 80 de Eastwood

Uno de los directores más prolíficos del cine contemporáneo es este norteamericano que hoy cumple 80 años, tanto sus trabajos como actor desde los años 50 hasta sus esfuerzos directoriales desde los 70 han sido objeto de las críticas más preciadas del medio. Ha mantenido una calidad enorme en cada una de las áreas en las que se ha visto envuelto, ya sea desde cantante hasta compositor de sus propias películas. Él sigue siendo el autor americano fundamental a la hora de ver la historia del país y de los hombres (y mujeres) que lo conforman, pasando por los mundos del Western y el Oeste, las calles de Los Angeles y el trabajo de los policías, los soldados que luchan lejos de sus casas, personas que han perdido algo muy preciado para ellos y que quieren volver a tener, ya sea el amor o un hijo; él ha sabido retratar de manera perfecta todas esas facetas del ser humano así como del americano (aunque no está restringido a ellos, como se ha podido ver últimamente). Hoy 31 de Mayo, mi intención es darle una pasada cronológica a las películas que he visto de Clint Eastwood, dando links, videos, imágenes y escritos para poder reflexionar acerca de la extensa carrera de este hombre que aún sigue trabajando, pero no sólo como director, sino también como actor, productor, escritor, compositor, cantante, etcétera.
Esta entrada se irá publicando todos los años el 31 de Mayo mostrando mi avance en el visionado de su trabajo, tanto en reevaluaciones de las mismas y otros links, repitiendo todo lo que he avanzado en los años anteriores, dejando claro qué he modificado.
Sin más les dejo con Clint, el Grande:

The Outlaw Josey Wales (El Fuera de la Ley, 1976, director, actor)
Clint Eastwood es un rupturista, en todo sentido, y eso se puede ver tanto en su vida como en su obra, tanto de director como de actor. Su vida siempre ha estado dividida en términos personales, ya sea por sus creencias políticas (bastante confusas a veces), como filosóficas, relacionadas principalmente por su tumultuosa vida personal. Él es lo más opuesto que puede ser a los personajes que interpreta en el cine: se trata de un hombre que escapó de la guerra, que ha vivido múltiples romances paralelos, completamente abierto a las otras culturas y uno de los hombres más dulces que existen si lo llegas a conocer bien (o eso es lo que dicen); por eso es que encuentro que los papeles que realice sean tan rupturistas, sobre todo si pensamos en que él es un liberal, pero interpreta al fascismo más recalcitrante en sus personajes, ya sea a través de la imagen del racista o del "vigilante".
Realiza toda clase de rupturas como director, pues el ritmo con el cual realiza sus filmes es casi vertiginoso para uno que ya está establecido en Hollywood, lanzando una o más películas al año, cosa que a muchos publicistas y a programadores de cartelera no les alegra, teniendo que lanzar las películas bastante alejadas la una de la otra, no siendo ese el estilo Eastwood de hacer las cosas. También es bastante raro que a un director se le premie tanto tan seguido, como ocurrió los años en que lanzó Million Dollar Baby y Mystic River, ambas siendo muy laureadas, como siempre son las películas de Eastwood, pero a la vez muy premiadas por la academia, cosa que rara vez pasa tan seguido.
Pero si de verdad se quiere encontrar una ruptura en sus películas, no hay que mirar más allá de Josey Wales, un western hecho en una época donde los westerns ya no eran importantes, un western con un Clint Eastwood que ya había empezado su carrera como director. Una historia interesante por la cantidad de quiebres que produce con respecto a lo establecido por la industria hollywoodense, empezando por un género que no es rentable en su época, como ya se ha dicho. Pero esta ruptura no se queda solamente en el ámbito del género, o incluso en la trama de la misma, de lo cual se hablará más adelante, sino que tiene que ver con algo que remeció los estatutos mismos con los que funcionaba la industria.
En un principio, la película iba a ser dirigida por Philip Kaufman, director de "La Invasión de los Ultracuerpos" en su versión de 1976 (se puede decir que dirigió esa película en vez de esta), incluso había escrito el guión de la misma, pero de un día a otro se fue del set y nunca más volvió. La producción, independiente en parte, no sabía qué hacer, tenían todos los actores, lso técnicos, decorados, listo para empezar, pero no tenían director. Como ya he dicho, en ese tiempo ya Eastwood había incursionado en la dirección, gracias a los consejos y enseñanzas de Sergio Leone. Tenía un par de buenas películas que lo avalaban como director, así que esta película se le traspasó a él, pese a que ya estaba contratado para actuar en ella. Fue tan grande el shock que produjo esto, que se creó la llamada "ley Eastwood", que dice que cuando un director no puede cumplir su tarea una vez iniciada la producción, ningún miembro de la misma puede tomar su lugar, sin importar cuál. Eso sí que fue un remezón para Hollywood, además que la película salió bastante bien pese a las críticas y todo.
Pero si volvemos a la trama, podemos encontrar elementos que de verdad rompen las estructuras establecidas por el género, partiendo por la no localización del héroe, siendo este un hombre que se ha dedicado a luchar y vagabundear desde que su familia fue asesinada, por lo que no tenemos un "pueblo" establecido como ocurre en la mayoría de los westerns estadounidenses, es solamente hacia el final que el "héroe" se establece en un lugar, pero se puede sospechar que no será permanente.
El otro punto que difiere es el de la identificación con el héroe, pues este desde el principio se identifica con los confederados durante la Guerra de Secesión, quienes fueron los que iniciaron la guerra al independizarse y finalmente perdieron la guerra. En fin, pese a ser todos estadounidenses, la película quiere identificarse (o tal vez no) con una figura que históricamente y audiovisualmente ha sido odiada, por haber iniciado la guerra y después por haberla perdido. Además, el personaje durante toda la película arranca de las fuerzas gubernamentales del nuevo Estados Unidos que ha ganado la guerra y que quiere enviarlo a la cárcel por haber pertenecido a una cuadrilla sureña que atacaba a la gente y soldados del norte. Sin embargo, nosotros terminamos apoyándolo, una proeza magnífica que le valió críticas positivas y la recaudación suficiente para poder hacer una secuela que no tiene nada que ver con esta película.
Un comentario sobre una escena antes de terminar. Hacia el final de la película, Josey Wales, interpretado de manera magnífica por un Clint Eastwood con una actitud de "no querer más guerra", logra obtener un terreno que comparte con una serie de estereotipos sureños, formando así un paraíso terrenal en el que hacen sus propias reglas. Josey Wales encuentra posibilidades en ese lugar creado para su satisfacción, puede volver a amar, formar una familia, etcétera. Es como lo que hicieron los hombres del sur al independizarse, quisieron aislarse del resto de Estados Unidos y formar su propia vida, con sus reglas, querían vivir en paz con su propio estilo de vida. El filme logra de alguna forma "subsanar" las decisiones que alguna vez tomaron los líderes de esos pueblos, pero no los hace menos terribles, los hace comprensibles dentro de su propio mundo.

Kevin B. Lee recopila críticas, miradas y varios documentos sobre esta película y sobre la obra de Clint Eastwood en un post de su blog Shooting Down Pictures.
The Firearm Blog muestra una serie de fotos de las pistolas ocupadas en la película, ahora en muestra por la NRA.
En The Clint Eastwood Archive, tienen una entrada para esta película, con fotos diversas y uno que otro video.
A continuación la canción de inicio de la película, disponible en Youtube:

Kevin B. Lee también realizó un ensayo en video sobre esta película, con motivo de su aparición en su blog, disponible en Youtube:

El trailer para cines está disponible en Youtube:


Unforgiven (Sin Perdón, 1992, director, actor, productor)
No soy un fanático de los westerns. Mi papá sí lo es, él ha visto muchos westerns, ya sea en la tele o en el cinerama, me acuerdo de sus historias de cuando fue a ver "Cómo se ganó el Oeste", "El bueno, el malo y el feo", "Mi nombre es Trinity" o "Hang 'em High". Sin duda que Clint Eastwood forma parte de su canon fílmico, aparte de la que sea su película favorita, pero es una parte importante de lo que él considera un héroe o un pistolero o un western tradicional. Tal vez es mi poca familiaridad con el género y el prototipo de héroe Eastwoodiano que "Sin Perdón" fue una película con la cual no me conecté.
Es claro que la película rompe con los cánones del western de manera mucho más fuerte que en "El Fuera de la Ley", que simplemente nos hace preocupar por un personaje del cual realmente tendríamos que odiar hasta sus entrañas. Esta película rompe con la figura misma del héroe, mostrándolo como un ser ya viejo y que no puede más, un hombre que ha dejado de lado la matanza para dedicarse a sus hijos y familia, un hombre con nombre, a diferencia del personaje interpretado por el mismo Eastwood en las películas de Sergio Leone.
Pero cuando este personaje sale de su retiro, dejando de lado a sus hijos bajo la tentación del dinero fácil, se ve que los héroes del western no son como los pintan, menos aún cuando están viejos. La verdadera sangre del pistolero es de un hombre que no discrimina, no importa a quién tenga que matar y no importa las características de esa persona, simplemente tiene que matar, y no es algo bonito con lo que se tiene que vivir. Se destruye la imagen del pistolero honorífico que busca hacer respetar el honor de quienes lo contratan por el de un ser que tiene que sufrir por cada muerte que provoca, ya no es como el personaje de un videojuego que mata y mata sin remordimiento.
Está el personaje de Kid que es quien vendría a representar la imagen del pistolero joven, que tiene cierta experiencia y que quiere hacerse de un nombre, pero que realmente es un cobarde y que puede llegar a prometer no volver a matar nunca más si es necesario, con el fin de poder sacar esa culpa de su cabeza, lo cual no logrará. Es en el personaje de Munny (Eastwood) donde vemos a un pistolero que ha querido hacer lo mismo, escapar de las muertes que ha provocado, pero que siente su sangre hervir y que tiene la necesidad de matar a toda persona que se cruza en su camino, a fin de demostrar que por lo que él lucha es "lo justo".
Tal vez sea eso lo que me haya molestado, no lo sé. Tal vez de un tiempo a esta parte tenga que cambiar esta entrada sobre sus películas cuando haya visto los westerns necesarios para poder entender cuál es la mentalidad del héroe Eastwood y del héroe western en general. Hasta entonces, no tengo mucho más que decir.

El sitio International Psychoanalisis tiene un artículo que usa la película como ejemplo de los casos de identificación con la muerte.
El guión completo de la película, disponible para leer aquí.
En el Clint Eastwood Archive tienen una página dedicada a esta película, con fotos y otros links.
El crítico de cine más famoso de Estados Unidos, Roger Ebert, tiene a esta película como una de sus Great Movies.
Trailer de la película para cines en HD, disponible en youtube:

domingo, 30 de mayo de 2010

Desestructuración del Tiempo


8. Tiempos Violentos (Pulp Fiction) (1994) c/ La Chica que podía saltar en el Tiempo (Toki o kakeru shôjo) (2006)
Esta entrada debió estar la semana pasada, pero no pude terminarla a tiempo, me tuve que ir al bar California a ver el final de Lost en vivo y en directo. Sobre Lost ya estoy escribiendo algo para contarles cómo me fue y todo, así que les dejo esto.
Juguemos con el tiempo, ¿ya? Es tan entretenido, puedes confundir a la gente, referenciando a cosas que van a suceder en el futuro o en el pasado, pistas que se descubren al verla por segunda vez, repitiendo escenas con distintas perspectivas, tomándole el pelo a la audiencia... ah, qué bueno es ver a la gente rascarse la cabeza y preguntarse adónde va todo esto. Algún día quiero provocar eso en la gente, de hecho, la película que tengo en pre-producción (de 2 años ya) pretende provocar esa sensación durante toda su extensión, pues encubre varios misterios que se irán entendiendo (pero no haciendo más claros) en los últimos veinte-quince minutos de metraje, terminando en suspenso, pues no me gustan los finales concluyentes.
Ahora, si nos vamos a estas películas, nos damos cuenta que la desestructuración del tiempo que ocurre en ellas es de distinta naturaleza. En Pulp Fiction, la historia se encuentra desordenada en diversos "episodios", distribuidos en un par de días, que son ordenados de tal manera de que la historia se vuelva interesante y las pistas que se entreguen sean graduales, dando a entender ciertas actitudes sobre los personajes cuando esto es necesario, o mostrando la consecuencia de eventos que aún no hemos visto y finalmente entendemos cuando los vemos cara a cara.
Por su parte, La Chica que podía Saltar en el Tiempo, parte normalmente como la historia de una alumna de secundaria que tiene dos amigos hombres y que de un momento a otro tiene el poder de volver en el tiempo cuando da un salto hacia adelante. En cuanto consigue el poder, entra la incertidumbre, no sabemos en qué día nos encontramos, en qué momento del día, qué es lo que ha vivido y qué no, es muy confuso de verdad. Los saltos en el tiempo a veces nos llevan al inicio de la historia, lo cual significa que no ha vivido nada de lo que hemos visto, pero a la vez ella lo recuerda, o a veces salta a incluso más atrás, sólo para comer algo delicioso. La cualidad de los saltos es bastante pueril y llevado por las hormonas, lo cual hace todo mucho mejor.
Mientras que Pulp Fiction la primera vez que la vi no me convenció del todo, y una segunda mirada me entregó lo necesario para entender la inteligencia de Quentin Tarantino a la hora de escribir una historia, sabiendo que esto no es un simple desorden de los hechos, sino sobre el preciso momento en el cual los hechos deben ser liberados al público.
En el caso de La Chica..., la primera vez que la vi, me enamoré. Tanto de lo visual, como de la chica principal, como de la historia, el viaje en el tiempo, todo era simplemente perfecto ante mis ojos, esa es la razón por la que ha quedado tan arriba en mi lista con sólo un visionado, algo parecido pasó con Bastardos sin Gloria.
No puedo dejar de recomendar ambas. Más que nada, la segunda, que pocas personas la han visto. Búsquenlas.
Tiempos Violentos (1994)

La Chica que podía Saltar en el Tiempo (2006)

sábado, 29 de mayo de 2010

Dennis Hopper (1936 - 2010)

Actor, director, Dios, qué triste. Se ha perdido un increíble talento, muerto por su cáncer de próstata, hizo demasiadas películas, pero sin duda que podía seguir años entregándonos lo mejor de sí. Como siempre, he decidido ir cronológicamente a través de su carrera, encontrando los puntos de las películas que he visto, así que acompáñenme en la carrera de este gran hombre que luchó para mantenerse vivo y finalmente perdió.
Primero quiero dejarlos con este link, con un video essay sobre Dennis Hopper, mostrando varios puntos de su carrera, todos interesantes a la vez que reveladores.
1955: Su primer trabajo en el cine fue en la película protagonizada por James Dean, "Rebel Without a Cause", donde hacía el papel de "Goon", seguramente un joven más con chaqueta de cuero. Arriba se puede ver en qué escena de la película sale, no sé si realmente saldrá más. Lo curioso es que también actuó en "Giant", la última película de James Dean, al año siguiente, en un papel mucho más grande. Eso lo hace importante, fue una de las personas que trabajó, por cosas del destino, en sus dos últimas películas.
1969: El trabajo por el cual será recordado es este modesto filme sobre la cultura hippie en Estados Unidos. Además de actuar en ella en el papel de "Billy", la dirigió y escribió, siendo este el movimiento que lo hizo conocido a nivel mundial. Realizó siete producciones más, pero ninguna con el nivel de éxito que alcanzó este reconocida obra maestra de una generación.
1979: En la película "Apocalypse Now", este hombre hace el papel de "Photojournalist", el personaje paranoico y loco tremendamente genial, de verdad que aliviana un poco la presión del momento de la película, con sus "friend", sus "if", todo lo que dice es demasiado bueno. Aparte, creo que está entre las mejores actuaciones que ha hecho. Les dejo un video para que vean el trabajo de este hombre.

1986: Ahora la que sea la mejor actuación que le he visto a este hombre es la que hace en la obra maestra de David Lynch, "Blue Velvet" como "Frank Booth". Es tan completa, tiene muchas cosas que uno puede descubrir, insinuaciones, secretos, claves para entender, etcétera. Además, da miedo, es como si lo tuvieras al lado tuyo, cada vez que veo un video de él se me pone la piel de gallina. Lo mejor de todo es que aceptó el papel, pues dijo que cuando leyó el guión, encontró que se parecía demasiado al personaje... ahora, sabemos que fue una buena persona, pero... cada uno sabe cómo es por dentro.

Este año fue muy ocupado para Hopper, pues realizó "Hoosiers", que le valió una nominación a mejor actor en los Oscares. Pero también hizo una película de terror, "The Texas Chainsaw Massacre 2", donde de verdad se va al chancho con su actuación de "Lieutenant 'Lefty' Enright", el acento predomina su voz y la película es muy entretenida, sobre todo en la lucha final, la que pondré abajo para que disfruten. "I am the Lord of the Harvest".

1993: La Película "Super Mario Bros." no es una buena película. De hecho es mala, muy mala, malísima. Pero de toda la película, lo más entretenido es ver la locura de Hopper, luchando por actuar con un material tan malo. Está lejos de ser su mejor actuación, pero tampoco es la peor, sin importar cuanto odies la película, puedes encontrar su genio en el papel de "King Koopa".
1995: Son dos películas juntas aquí que No Soporto, en serio, "Waterworld" fácilmente puede ser la película más larga y mala que he visto. Cada decisión está mal hecha, todo por el ego de... bueno, sabemos de quién. Nuevamente el único momento de provecho que podemos sacar de esta película es el personaje de "Deacon", interpretado por Dennis Hopper, nuevamente el malo malísimo de una película mediocre.
2002: Aquí hay una rareza. Dennis Hopper hizo la voz de un personaje de videojuego, el de Steve Scott en "GTA: Vice City", dándole una actitud suya a un personaje bastante gracioso.
También hizo del primer malo malísimo de la serie "24" en su primera temporada el mismo año 2002. Se nota que hay cierto rumor de "type-casting" alrededor de él, pero cada vez que hacía de "Victor Drazen" en esa serie, era un bomba.
2005: En la película de George Romero "Land of the Dead", hace de "Kaufman", que con joyitas como "Zombies, man. They creep me out." o "We do not negotiate with terrorists!" hace de una metáfora de Bush demasiado graciosa a la vez que crítica.
Espero encontrar muchas más cosas de este gran hombre. Hasta ahora, sólo digo que descanse en paz Dennis Hopper. RIP.

domingo, 16 de mayo de 2010

La Guerra y el Humor

9. ¿Teléfono Rojo? ¡Volamos a Moscú! (Dr. Strangelove, or: How I Learned to Stop Worrying and Love the Bomb) (1964) c/ Bastardos sin Gloria (Inglourious Basterds) (2009)
Vaya, nos acercamos cada vez más a lo más interesante, por mientras tenemos dos obras maestras que de una manera u otra hacen que la guerra sea algo entretenido, algo de lo que te puedes reir.
La película de Kubrick (su primera obra maestra), en sí, es una comedia pura y dura que tiene que verse con un conocimiento cabal acerca de las relaciones entre Estados Unidos y Rusia, a fin de poder reírse de los chistes. Eso no quiere decir que sea un humor inteligente, sino que se trata de un humor tanto local como temporalmente localizado, las risas en el cine deben haber sido estruendosas a la vez que nerviosas ante la posibilidad latente de una Guerra Nuclear (que en esos años era más probable que nunca). Eso no quiere decir que la película no tenga ninguna gracia para la persona común y corriente que entra sin información a la película, pues tiene mucho slapstick, es decir, humor físico, sobre todo relacionado con el personaje del general loco Jack D. Ripper, pero una persona así no va a encontrar que sea la novena mejor película que ha visto en su vida, sino una lenta con algunos chistes graciosos al final. Mucho de lo que lleva a esta película a niveles de comedia tan altos es la actuación, que en ningún momento es tonta, sino que muy seria, lo que vuelve a toda la situación mucho más gracioso. El nivel de actuación es muy bueno y muy parejo, pero sin duda que es Peter Sellers quien se lleva el premio al interpretar a tres personajes: un capitán que trata de evitar la Guerra Nuclear, el presidente de Estados Unidos y el Dr. Strangelove (que aparece en los últimos minutos de la película), las tres actuaciones muy distintas, pero demasiado graciosas cada una de ellas, él era un maestro. Una de esas imprescindibles para cualquiera que se considere cinéfilo (no digo que debe gustarle, sólo que debe verla, aunque si no le gusta... es un imbécil).
Sobre Bastardos sin Gloria he hablado mucho y demasiado, creo que bastante de lo que tengo que decir sobre esta lo pueden leer aquí. Sin embargo, algo que no he mencionado sobre esta obra maestra es lo que une a estas dos películas y que las hace compartir el glorioso número 9, hablo del humor. Al contrario de Strangelove, Bastardos no es una comedia, pero hay pequeños eventos que hacen a uno carcajear ante lo entretenidos que estamos ante una película tan increíblemente inventiva, como es la pipa de Hans Landa o el italiano hablado por Aldo el Apache. Son pequeñas cosas que nos vienen a recordar lo entretenidas que eran las películas antes, nada más, pues para eso fueron inventadas, para pasar un buen rato y nadie que haya conocido personalmente no ha tenido un excelente tiempo con la última creación de Tarantino.
¿Teléfono Rojo? ¡Volamos a Moscú! (1964)

Hint: Uno de los mejores trailers de la historia.
Bastardos sin Gloria (2009)

miércoles, 12 de mayo de 2010

Recordando A.I.

Ambición, por Jaime Grijalba.
Más conocida como la película con el niño de Sexto Sentido y que supuestamente era el último trabajo de Stanley Kubrick, pero murió antes de realizarlo, y que fue completado por Steven Spielberg. Me sorprendió mucho ver esta película en muchas listas de "lo mejor de la década", siendo que mis recuerdos sobre la crítica no eran muy positivos, de todo el trabajo de Spielberg de los 2000s me quedo con Indiana Jones 4 y Atrápame si Puedes, dos obras cercanas a la maestría entretenida. Incluso en el ámbito de la ciencia ficción tiene un trabajo mucho más memorable como es el de Minority Report, fue una década muy buena para él, pero de "lo mejor de la década"... ni de lejos.
La película trata sobre esta familia que tiene un hijo, pero está en coma, por lo que el padre decide comprar un robot androide de repuesto para que la madre lo trate como un hijo, sacando de sí su aspecto maternal. Es bastante tétrico pensar en la mente de estas dos personas, sabemos que estamos en el futuro, pero igualmente los sentimientos son cosas existentes. Afortunadamente el tema es tocado, la madre es resistente ante la idea de tener un "hijo de repuesto", llegando a odiar a este pequeño y adorable androide; lo mismo el padre, que llega un momento, cuando la madre ha superado ya la barrera de la resistencia y ha caído en el "amor" hacia el ser, cree que esto puede ser peligroso, llegando a culparse por llevarlo a casa en primer lugar, asegurando que no es más que un objeto y no deberían acostumbrarse mucho a él, menos llegar a involucrarse sentimentalmente.
El problema de Inteligencia Artificial en sí es que tiene demasiados giros, el primero siendo el repentino despertar del hijo verdadero, provocando una serie de rivalidades tanto físicas como sentimentales, tanto entre la madre y sus "hijos", y entre los "hermanos". Pero, siendo muy honestos, ¿vamos a querer que el androide sea el que gane el afecto de la madre? Es obvio que es él quien debe irse cuando los problemas son demasiados entre el hijo y el robot. Tanto la fotografía, como la filmación y edición de la escena en que dejan al hijo sustito en el bosque junto a su oso de peluche animatronics (el mejor personaje de la película) son perfectas, pero es obvio que está hecha para que sintamos pena por una cosa con apariencia humana, pero que realmente no lo es, a mí no me provocó nada, era lo que debía hacerse.
Hay muchas citas a lo largo de la película a casi todo el cine de ciencia ficción de toda la historia, tanto en las ciudades (Metrópolis) y ciertos diseños de androides (Terminator 2), pero la más clara de todas es una referencia literaria: "Pinocho". Mientras que en la misma película aparece la historia, contada por la madre, al mismo tiempo después hacen aparición escenas que son citas claras a acontecimientos del cuento, como es el carnaval del cuento que aquí se traslada a una ciudad del placer (Rouge City), así mismo como la ballena es reemplazada por un artilugio de navegación submarina; qué decir de la Hada Azul, qué más directo. Se puede decir que es una versión renovada de la historia del objeto que vive y quiere ser un niño de verdad.
Pero mientras que lo de las citas está bien, sobre todo si son veladas e implican un homenaje, el problema de este "Pinocho" moderno es que ambiciona mucho, y creo que con lo que he escrito he podido demostrarlo de alguna forma. Primero quiere hablar de una tecnología magnífica como es la de estos robots con capacidad de amar, luego quiere hablar sobre la complejidad de los sentimientos humanos, después quiere hacernos sentir pena por este cyborg, luego nos introduce una sociedad de robots rebeldes, quiere ser el último proyecto de Kubrick teniendo tomas "tipo" y una cierta atmósfera casi kubrickiana, si se puede llamar de alguna manera, quiere tener un mensaje contra la frivolidad (el personaje del Gigolo robot es detestable para mí), a la vez que quiere ser una nueva perspectiva sobre el cuento de Pinocho, quiere tener un mensaje ecológico sobre el futuro de la humanidad, además de una moral incorregible acerca del amor y la vida y la muerte. Yo no estoy en contra de las ambiciones, pero me gustaría que una película al menos cumpliera la mitad de ellas, o las desarrolle mejor.
No lo pudo haber dicho mejor Doug Walker cuando hizo su versión de esta película en 5 segundos, la película no termina nunca, tiene como 163.259 finales, es realmente desesperante pensar en cómo por el hecho de querer tocar tantos temas, termina uno y la película parece terminar... pero no, sigue con un nuevo tema que acaba de descubrir. Esto no quiere decir que la película sea mala, ojo.
Hay muchas cosas buenas en esta obra de Spielberg, y una son los efectos especiales, realmente coloridos y muy avanzados, me acuerdo que esos cyborgs se veían muy impresionantes en la época en que los vi. Otra cosa es la actuación de Haley Joel Osment como el robot que puede amar y quiere ser humano, es simplemente de lo mejorcito de la película. Eso es lo que salva a la película de ser un completo desastre, eso y el hecho de que me entretuvo y tuvo que pasar mucho tiempo (9 años) para darme cuenta de todas las fallas que tenía esta película. Visualmente también es una delicia, pero esto viene de una maniobra de hacer todo al "estilo kubrick", pero se agradece pese a todo, los colores son muertos cuando deben serlo y son vivos en las partes lujuriosas (jujui), todo bien en ese departamento, así mismo con la banda sonora de John Williams, que nunca falla (pronto haré un post de este personaje).
Sumando y restando, lo que le queda a uno después de terminar la película es pura ambición y poca ejecución, pero la cantidad de cosas que hay tras esta ambición es tan interesante que la salva de ser odiada por mi, sino mas bien una película que hay que ver... una sola vez.
Le pongo un 7.5, es decir, un 8.
Este post va para las 1001 películas, el blog en el que participo.