jueves, 6 de agosto de 2009

John Hughes: La Verdadera Voz de los 80s

¿Por qué la gente buena se muere tan joven?
El famoso escritor y guionista John Hughes ha muerto a los 59 años el día de hoy. Él es el padre de Todas las comedias juveniles e inspirador del movimiento televisivo y cinematográfico Tween de hoy en día. Viendo sus películas se puede entender perfectamente cómo era la juventud de los años ochenta, que es cuando hizo todas sus películas para luego retirarse, seguramente no le gustamos como generación (90s).
Entre sus éxitos cuenta "Vacation" (1983), escrita y basada en un cuento que él escribió, esta es la primera de todas esas películas de vacaciones de Chevy Chase con su familia, se mantuvo como productor y escritor de sus secuelas. "Sixteen Candles" (1984), dirigida y escrita. "The Breakfast Club" (1985), escrita y dirigida, la que muchos consideran el epítome de los 80s, tanto por su música como por los temas que tocaba y los tipos de jóvenes que presentaba. "Ferris Bueller's Day Off" (1986), escrita y dirigida, le dio un salto a la carrera de Matthew Broderick, además de ser una película sobre un niño que hace la cimarra: GENIAL. "Planes, Trains & Automobiles" (1987), escrita y dirigida, hizo que Steve Martin diera una buena performance, más allá de lo normal.
Dentro de sus otros éxitos, pero no tan destacables, está el guión de las dos primeras "Mi Pobre Angelito", además de escribir la primera película de "Bethoven", el perro baboso. Escribió el guión de "101 Dálmatas" versión People y "Flubber", la pegatina loca.
Que lo haya atrapado Dios.
Abajo, mi segunda mini-crítica, hechas de películas que se estrenan hoy.

1 comentario:

papi dijo...

Una gran pérdida, murió el principal responsable de que mi infancia no haya sido del todo miserable, las teclas del notebook no pueden escribir como todo llora mi alrededor... mi colección de estampillas llora, el turrón de revistas penthouse que escondo en el entretecho llora, debajo de mi cama un desayuno a medio comer llora y hasta las babas de perro bethoven que yacen aún frescas sobre el piso de mi desván parecen estar sollozando, Q.E.P.D.