domingo, 20 de marzo de 2011

Creature from the Black Lagoon (1954)

Renoir y Bergman, por Jaime Grijalba.
Ya ha pasado algo de tiempo desde que vi por primera vez este clásico de la Universal, y una de las últimas películas de monstruos de esta compañía en su edad de oro, y me había parecido competente, entretenida, obviamente un tanto ridícula, valía la pena verla, pero no era lo mejor que había hecho este equipo. Debo decir con toda claridad que me había olvidado completamente de ella al poco tiempo de haberla visto, pero a los dos meses, o algo así, pude ver unas escenas en la televisión nuevamente y... quedé hipnotizado.
Era una de las escenas que ocurren bajo el agua, creo que la primera. La chica linda de la película se pone su apretado traje de baño y empieza a nadar... no, no fue la figura de esta mujer la que me mantuvo hipnotizado, aunque sí era bella, no era algo para quedarse embelesado mirando, hay cosas mejores a un click en internet. La cuestión es que debajo de ella se pueden ver las movedizas algas que acarician los pies de la mujer y a la vez esconden a la horrorosa criatura, que estaba siendo interpretada en ese momento por Ricou Browning, un experto en estos temas.
No sé cuánto dura la secuencia, pero es como un trozo de oro rodeado de carbón, que también es útil, pero no tan bello. Esa secuencia bajo el agua, la primera, en la cual vemos por primera vez al monstruo mientras esta mujer nada es una de las mejores escenas de la historia del cine, fácilmente. La manera en que está coreografeada y editada es simplemente una belleza, como sacado del mejor cine arte europeo, y eso incluye el diseño del monstruo. Hay algo que atrae en esta película y se encapsula en esa pequeña escena. Jean Renoir hizo algunos arreglos para el guión, después de todo estaba en ese momento en Estados Unidos realizando películas, y eso le pudo dar cierto nivel.
Luego tenemos el conocido hecho de que Ingmar Bergman, reconocido como uno de los mejores directores de la historia del cine, la veía todos los días de su cumpleaños. Tal vez había algo en la fotografía, algo en ese blanco y negro, en esa piscina de estudio que hizo de ese río de las Amazonas había una perfección que se transformó en inspiración para estas personas y para muchos directores jóvenes que vieron en esto la posibilidad, la inspiración, la capacidad de hacer algo que se acercara a lo que los haya hipnotizado cuando niños.
8/10

2 comentarios:

Sam Juliano dijo...

Despite spending a good part of my life studying the work of Ingmar Bergman and reading so much much that has been written about him, I never realized he engineered this annual ritual. Yes, despite it's flaws it's a film that captured peoples' imaginations, and it was the forerunner of the reptilian sci-fi craze of the 50's. Largely, it's a boring rather unimaginative film, but it exerted an enormous influence. Few realize Clint Eastwood's first movie role was in it's first sequel, THE REVENGE OF THE CREATURE.

Jaime Grijalba dijo...

Well Sam, I don't know how much of unimaginative film can be, being that it is kinda the first of the films of its kind. Historically speaking it could be seen as the first and one of its kind.