Elizabeth Taylor (1932 - 2011)

Una de las últimas estrellas e íconos del cine en los años dorados ha fallecido por causas relacionadas con el corazón y toda la comunidad online y del cine se ha sentido muy dolida a causa de esta terrible noticia, ya que pese a encontrarse desde ya hace algún tiempo complicada de salud, 79 años no es una edad para morir. Mi abuela va a cumplir 81 y la veo mejor que nunca, así que siempre va a ser una pena perder a ese ícono.
Como siempre, iré revisando año por año su filmografía, notando las películas que he visto de ella:
1958: Cat on a Hot Tin Roof. Considerado uno de sus mejores roles, aunque su papel podría confundirse por eye candy, su actuación en este clásico teatral es impresionante, pues logra hacerle el peso a su contraparte amorosa. La tensión sexual entre ambos se palpa y eso se debe a dos razones, a la enorme y complicada actuación de Liz y lo sexy que era ella, no vengamos con cosas.
1959: Suddenly, Last Summer. Ella hace de la novia del hombre que fue asesinado en un paìs lleno de salvajes... curiosamente, nuevamente està emparejado con un personaje cuya sexualidad no està enteramente definida, lo cual resulta una elecciòn tremendamente interesante, pues su cuerpo claramente es como para no equivocarse, ¿no creen ustedes? De todas maneras, esa escena final del relato indica una enorme potencia actoral, poderosa de veras.
1994: The Flintstones. La película de los Picapiedras no podría estar más lejos de las obras que se acaban de revisar, pero merece un lugar pues fue uno de sus últimos papeles, y hay que reconocer que no se ha visto más glamorosa que con una piel de dinosaurio encima. Auga.

Que descanse en paz.