domingo, 16 de mayo de 2010

La Guerra y el Humor

9. ¿Teléfono Rojo? ¡Volamos a Moscú! (Dr. Strangelove, or: How I Learned to Stop Worrying and Love the Bomb) (1964) c/ Bastardos sin Gloria (Inglourious Basterds) (2009)
Vaya, nos acercamos cada vez más a lo más interesante, por mientras tenemos dos obras maestras que de una manera u otra hacen que la guerra sea algo entretenido, algo de lo que te puedes reir.
La película de Kubrick (su primera obra maestra), en sí, es una comedia pura y dura que tiene que verse con un conocimiento cabal acerca de las relaciones entre Estados Unidos y Rusia, a fin de poder reírse de los chistes. Eso no quiere decir que sea un humor inteligente, sino que se trata de un humor tanto local como temporalmente localizado, las risas en el cine deben haber sido estruendosas a la vez que nerviosas ante la posibilidad latente de una Guerra Nuclear (que en esos años era más probable que nunca). Eso no quiere decir que la película no tenga ninguna gracia para la persona común y corriente que entra sin información a la película, pues tiene mucho slapstick, es decir, humor físico, sobre todo relacionado con el personaje del general loco Jack D. Ripper, pero una persona así no va a encontrar que sea la novena mejor película que ha visto en su vida, sino una lenta con algunos chistes graciosos al final. Mucho de lo que lleva a esta película a niveles de comedia tan altos es la actuación, que en ningún momento es tonta, sino que muy seria, lo que vuelve a toda la situación mucho más gracioso. El nivel de actuación es muy bueno y muy parejo, pero sin duda que es Peter Sellers quien se lleva el premio al interpretar a tres personajes: un capitán que trata de evitar la Guerra Nuclear, el presidente de Estados Unidos y el Dr. Strangelove (que aparece en los últimos minutos de la película), las tres actuaciones muy distintas, pero demasiado graciosas cada una de ellas, él era un maestro. Una de esas imprescindibles para cualquiera que se considere cinéfilo (no digo que debe gustarle, sólo que debe verla, aunque si no le gusta... es un imbécil).
Sobre Bastardos sin Gloria he hablado mucho y demasiado, creo que bastante de lo que tengo que decir sobre esta lo pueden leer aquí. Sin embargo, algo que no he mencionado sobre esta obra maestra es lo que une a estas dos películas y que las hace compartir el glorioso número 9, hablo del humor. Al contrario de Strangelove, Bastardos no es una comedia, pero hay pequeños eventos que hacen a uno carcajear ante lo entretenidos que estamos ante una película tan increíblemente inventiva, como es la pipa de Hans Landa o el italiano hablado por Aldo el Apache. Son pequeñas cosas que nos vienen a recordar lo entretenidas que eran las películas antes, nada más, pues para eso fueron inventadas, para pasar un buen rato y nadie que haya conocido personalmente no ha tenido un excelente tiempo con la última creación de Tarantino.
¿Teléfono Rojo? ¡Volamos a Moscú! (1964)

Hint: Uno de los mejores trailers de la historia.
Bastardos sin Gloria (2009)

1 comentario:

Anónimo dijo...

You are so nice to share these with us.