Esperaba algo de verdad bueno, de verdad le di oportunidades, traté de verla con los ojos de esos críticos, lo logré hasta cierto punto, pero no puedo amarla, menos idolatrarla y mucho menos decir que es una obra maestra.
Primera cosa, me dijeron que Adam Sandler no era chistoso, pero es una mentira: me he reído más con él en esta película que en cualquiera de sus otras comedias, en serio, toda esa actitud era tan... tan... YO. en serio, me pude conectar como nunca con un personaje, pero eso es algo personal y es una de las razones por la cual se salva del infierno. El personaje es tímido, práctico, imaginativo, medio perkin, a veces explota, pero buena onda (...).
Segundo, la película me exhasperó hasta puntos inimaginables, tapando lo que no debería tapar, haciendo movimientos que no tenían sentido, ¡le gritaba a la pantalla! Me desesperaba, le quería pegar a PTA por porfiado y no haber estudiado cine (ja!). Está bien que experimentes, pero eso es de verdad inaguantable, no se puede estar cómodo.
Tercero, si conocen la historia sabrán... que NO hay historia. Es un montón de hechos inconexos, encadenados muy débilmente. El eje principal de la película es el posible enamoramiento entre el personaje de Adam Sandler y la mujer de sus sueños, a esa historia (que no tiene conflicto ni tropezones que no se solucionen en tres segundos) se le añade la de las llamadas eróticas, que se conecta de forma tan aislada, tan forzadamente que es como si les faltara película y tuvieran que rellenar con esa historia, además de malgastar un EXCELENTE personaje de Phillip Seymour Hoffman como pimp.
Cuarto, no reclamaré sobre cierto trabajo de cámara, que en las escenas de llamados telefónicos es superb. Hablando de eso, la película gira en torno a los teléfonos y no hay cambio, no existe el mail ni el correo ni nada, puro teléfono... molesta un poco, hay falta de variedad, se pasa de conversación en conversación.
Quinto y último, la única otra razón por la cual se salva esta película es la Teoría, deberían saberla, la cual dice que la mujer de la que se enamora Adam Sandler es marciana. Y puedo ver porqué, las notas que toca en el harmonio, las luces extrañas que aparecen, la luz al final, el hecho que aparezca siempre desde la luz, el que sea tan adorable y que perdone tan fácilmente. Es atractivo ver algo así en una película "normal", con una mejor historia hubiera sido mejor.
En resumen, pese a sus fallas, imperdonables, me logró cautivar por su personaje y una teoría particular, así que recibe un 8.
Diría que si no fuera por PTA, les aseguro que tendría un 3 ó 2.
Adieu.