martes, 19 de abril de 2011

Sam's Flick Picks #16 - Night Train to Munich (1940)

Terminado el ciclo Ozu de las Sam Flick Picks, así mismo como la gran sorpresa que fue ver "The Devils" (1971) la semana anterior, no puedo si no esperar a que venga la nueva temporada (ya prometida por Sam Juliano en los comentarios en este blog), pero antes de eso, debemos terminar la primera temporada, y en esta ocasión tenemos una película inglesa de enorme factura y comprometida visión, que contiene a su vez, una pareja de actores que para algunos puede resultar conocida. Dirigida por Carol Reed, los dejo con el antecesor de James Bond, una historia de espías y traiciones a la vez que giros inesperados.
La historia transcurre un año antes de que empiece la Segunda Guerra Mundial, vemos a Hitler planear sus ataques dando furiosos golpes contra un mapa de Europa, golpeando diversas zonas que luego vemos ser invadidas por material de registro de ese tiempo. Cuando el puño golpea Praga, vemos a uno de los científicos del metal más importantes ser cuidado por sus congéneres para que huya a Inglaterra junto a su hija. Ella, lamentablemente, es interceptada por la Gestapo y puesta en un campo de concentración, donde se hace amiga de un hombre que la ayuda a escapar a Inglaterra... pero que al llegar ahí descubrimos que no es más que un agente de la Gestapo que quiere saber dónde se encuentra su padre.

Ella finalmente encuentra a su padre, que está siendo protegido por un agente del servicio secreto británico, quien es rápidamente noqueado para que el más poderoso ingeniero del metal de Praga y su hija sean llevados a Berlín para que cooperen con el Tercer Reich, lo cual es simplemente atribuible a la torpeza inglesa y la astucia alemana (ojo, que ambos aspectos son intercambiables). Este agente, llamado Gus Bennett, decide tomar el toro por las astas e ir a Alemania disfrazado de almirante alemán para poder sacar a ambos del país antes que se declare la guerra entre Inglaterra y Alemania. Así es como la aventura empieza, que combina una enorme cantidad de astucia (les dije) de el agente Bennett, así como la suerte y una escena de acción final que todos reconoceremos en nuestras mentes, por alguna razón.
La película es tremendamente disfrutable a causa de sus intrigas y giros que se realizan más o menos cada quince minutos, lo que da cuenta de una enorme capacidad y conciencia acerca del ritmo que tiene la película, pues uno puede empezar a sentir cuando un giro se acerca y empieza a vislumbrar pistas y finalmente se sorprende y empieza a pensar cómo es que lograrán salvar este obstáculo. Como película de espías funciona magníficamente y toma muchos riesgos, sobre todo si pensamos en la época en la cual se encuentra ambientada y el año en que fue estrenada, estábamos en plena guerra mundial. Sin embargo, pese a ser rodada en Inglaterra y con actores ingleses en ningún momento se siente como propaganda.

Los actores son simplemente magníficos, Margaret Lockwood es una preciosura y siempre entrega líneas de manera convincente como la hija del ingeniero Bomasch. A su vez, Rex Harrison, interpreta de manera magnífica a un cantante, un agente de servicio secreto, un alemán encubierto, sin perder nunca su personalidad inventiva y una chispa interior que siempre da agrado mirarlo. Paul Henreid, que daría su mejor actuación como el judío escapado Victor Lazlo en "Casablanca" (1942), aquí resulta competente haciéndonos creer que es bueno para luego transformarse en el malo que todos odiamos. Pero hay dos actores que sobresalen: Basil Radford y Naunton Wayne, que hacen el papel de dos ingleses amigos y bastante graciosos que parecen siempre estar metiendo la pata, conocidos como Charters y Caldicott, pareja que antes había aparecido en la cinta de Alfred Hitchcock "The Lady Vanishes" (1938).

Ellos elevan la película al tono humor... pero tal vez demasiado, y muchas veces mantenían largas conversaciones en las cuales pasan sobre diversos temas personales y que nos desesperan porque deben haber cosas más interesantes pasando cerca de ellos. Aunque finalmente su participación es esencial, durante algunos segundos pueden resultar exhasperantes, lo cual no es su culpa, sino de los guionistas, que querían ponerlos pero no sabían qué papel darles hacia ya el final de la película (en un tren, al igual que en su primera aparición).
Pese a todo, es entretenida, tiene buenas escenas, excelentes diálogos y una presencia amenazadora que se mantiene en cada segundo en el que estamos en territorio alemán. Recomendada. Sobre el DVD, excelente, es un Criterion y tiene la película en una excelente calidad auditiva y visual, a la vez que subtítulos en inglés que me permitieron seguir mejor la película. Además, hay un extra que conversa acerca de los guionistas de la película, bastante interesante.
8/10

1 comentario:

Sam Juliano dijo...

. "Directed by Carol Reed, I leave you with the predecessor of James Bond, a history of spies and betrayals while twists."

Absolutely Jaimie! Excellent connection, and some great analysis to follow. Lockwood is always terrific, (no less here) as is Harrison and that comedy relief duo, who as you aptly mention brought the same to Hitch's THE LADY VANISHES. This is a taut thrilled from Sir Carol Reed, though you rightly note it's propaganda. Many films made in those years promoted teh same agenda.

Yep, it's an excellent-quality DVD. There will indeed be more to come my friend!