Paranmanjang (2011)

Esta es la crítica a una de las películas más esperadas del 2011, de acuerdo a la lista que hice a inicios de este año, entre las cuales se contaba este cortometraje en el segundo lugar de la lista.
Aifon Cuatro, por Jaime Grijalba.
Finalmente pude ver Night Fishing, como ha sido llamada desde su original título en coreano, pero no ha sido el visionado perfecto, debido a que la imposibilidad de conseguir esta película, la cual ya tuvo su lejano estreno en el festival de Berlín a inicios de febrero de este año, pero que aún no ha sido lanzada en DVD u online de ninguna manera realmente veible. Por esto, ha sido una suerte encontrar una versión de este cortometraje de poco más de media hora, disponible en un Festival online de cortometrajes Apple, pero sin subtítulos, pero ya lo había encontrado, así que una cosa tan mínima como subtítulos no iba a detenerme luego de una larga y desesperada búsqueda que se remonta desde enero hasta diciembre (en el día 24 de diciembre) donde es posible encontrarla, por suerte, haciendo una investigación sobre "Stoker" (2012), el primer largometraje internacional que realizará el director de este cortometraje: Park Chan-wook.
Sin embargo, Park Chan-wook no es el único director (ni escritor) de esta hermosa pieza cinematográfica, pues en esta ocasión es acompañado por su hermano y también cineasta (aunque más nóvel, siendo esta una de sus dos experiencias cinematográficas del 2011, las primeras que realiza) Park Chan-kyong, que promete mucho con lo mostrado durante este cortometraje, y sé a lo que me refiero con esto, porque es fácil distinguir dos partes dentro del todo de la narración, divididos en el espacio-tiempo, por lo que podemos distinguir un estilo propio del de Wook, frente a un estilo desconocido pero tremendamente atrayente, que supongo es de Kyong, así que tenemos un nuevo talento al cual mirar en el futuro.
Night Fishing ganó su fama inicial por dos razones, las cuales la hicieron en un principio algo que se debe ver antes que se estrenara, fue la presencia de Park (ahora, de los Park) en la silla de dirección, y la otra es que la película fue grabada completamente usando una cámara de iPhone (de ahí la razón porque la encontrara en un festival Apple), pero obviamente no fue usado el iPhone 4 sólo como implemento, obviamente hubo luces, vestuario y otras cosas (el corto terminó costando poco más de 100.000 dólares), y menos con la carcasa sola, obviamente se hizo un trípode especial, así como un adaptador de lentes de cine para darle una especie de profesionalismo que se nota, pero aún así dándole esa cualidad onírica que tienen los videos grabados de dispositivos móviles.
Pero, después de todo esto, queda decir que es un cortometraje extraño. Muy extraño, pero muy genial a su vez. El hecho de que no haya podido verlo con subtítulos tal vez me substrae de decir algo totalmente definitivo sobre la misma, quién sabe, puede terminar siendo una obra maestra y yo no lo sepa aún, o a lo mejor lo contrario (aunque lo dudo), pero trataré de decir lo que entiendo en cuanto a trama y a lo que se puede vislumbrar acerca de este increíble cortometraje. Bueno, la cuestión es que el cortometraje parte con una banda coreana que cuenta con variados y anacrónicos instrumentos, y qeu cantan una canción lenta pero decididamente épica, de la cual no sé absolutamente nada. Es en esta sección donde podemos ver las primeras ventajas de la visualidad del iPhone, porque tenemos tomas muy cercanas de las guitarras, los tambores, las manos y las caras de los músicos encargados de entretenernos y ponernos en "sintonía" con lo que vamos a ver.
Luego nos encontramos en un lago, donde llega un pescador con un rostro muy peculiar (los coreanos son muy parecidos a los chilenos), que pone una serie de cañas y carnada para atrapar un pez, todo esto en una atmósfera gris y fría que llena nuestros pulmones con cada segundo que pasa. Cuando vemos finalmente qué es lo que logra sacar del agua, nos damos cuenta que nos encontramos ante una cinta más afín con el terror asiático del más clásico que puedes encontrar: fantasmas. Pero un giro en la trama, el cual nos lleva a un lugar mucho más colorido e interesante, enraizado en las costumbres espirituales y religiosas de los coreanos, nos encontramos con que los papeles han cambiado, nos damos cuenta de que algo no está bien y que tenemos en nuestras manos algo... que no podemos comprender completamente por la falta de subtítulos.
Sin embargo, el cortometraje se sostiene dentro de su idioma coreano, impasable para algunos (la mayoría), pero que gana por visualidad y porque sugiere y narra con los elementos que nos muestra. Una de las mejores películas del año, por lejos.

9/10