

300. You Ain't Seen Nothing Yet - Bachman-Turner Overdrive (BTO)
93. Buffalo '66 (1998)
Con canciones como "Moonchild" de King Crimson y "Heart of the Sunshine" de Yes esta película es lo mejor en cuanto a a música y que esta película es un montón de tomas distintas, géneros, experimentaciones, haciéndolo, como ya dije, el rock progresivo hecho película. Billy Brown salió de la cárcel por un crimen que no ha cometido y debe ir a ver a sus padres, que no saben que ha estado preso. Les ha dicho que está casado y que trabaja para el gobierno, para lo cual decide raptar a una joven para hacerla pasar por su esposa. Sus padres son fans de los Buffalos, un equipo local de fútbol americano y, justamente, Billy nació en la última fecha en que este equipo ha ganado el Súper Tazón, el año 66. ¿Lo mejor? Es una seudo biografía de Vincent Gallo, quien es el director, guionista, protagonista, productor y compositor de la música original. AWSM! Véala.Inspirado en Don Juan de Dios Vial Larraín. Un facho.
Javier corre por las calles del centro de Santiago, seguido de cerca por su madre. La Pequeña Gigante ya ha despertado frente al Palacio de la Moneda y ha empezado su viaje para atrapar al Rinoceronte.
Por distintas pistas, recibidas desde varias fuentes, Javier sabía que la Pequeña Gigante se dirigiría a la Plaza de Armas. Los tacones de la madre de Javier resuenan contra el asfalto mientras corren, siguiendo a la maravilla francesa. A lo lejos pueden ver las barreras y las filas de carabineros resguardando a la gente que corría para allá.
La Pequeña Gigante se detiene en la Plaza de Armas y ve una jaula cubierta por una manta azul y rodeada por unos guardias circenses, también vestidos de azul. Javier se sube a una de las bancas de la Plaza para ver la figura de madera, después ayuda a su madre para que también suba y los vea. Un carabinero los ve y les pide que se bajen.
Javier y su madre están corriendo otra vez, alejándose de la Plaza de Armas en dirección a la Estación Mapocho, donde se descubriría finalmente la jaula, mostrando al Rinoceronte atrapado. La gente, igualmente informada que ellos, corría también, dejando atrás su edad o su madurez, no importa nada frente a este evento, todos son niños, todos vuelven a ser verdaderos.
Hay barreras de metal alrededor de la Estación Mapocho, carabineros resguardan los bordes, la gente se amontona contra las barreras, pero Javier y su madre vienen desde el otro lado, por lo que están en la calle por la que pasará la Pequeña Gigante, una posición privilegiada, pensando en que todas las otras personas están del otro lado de la barrera.
Tratando de evitar problemas, Javier y su madre se ponen contra la barrera metálica, subiéndose a un borde de la vereda, tratando de no entorpecer el futuro paso de la gigante marioneta de madera. Un carabinero está al lado de ellos y les pide que salgan de ahí. La madre de Javier responde:
- ¿Por qué, si no estamos molestando a nadie? Estamos encima de la vereda.
- Por favor, salga señora. - replica el carabinero, ahora con un tono mucho más duro y fuerte.
- No molestamos a nadie. - dice de nuevo la madre, mientras escucha cómo se acerca la Pequeña Gigante.
- Mamá, - dice Javier - salgamos de acá, sabré yo cómo son los pacos, estos pegan el palo altiro. En las protestas de año pasado siempre pasaba, uno no hacía nada y ¡bam! Para adentro.
El carabinero lanzó una mirada venenosa a Javier, mientras la madre le decía a su hijo que no se moverían de allí. La Pequeña Gigante aparece, la madre de Javier la mira embelesada, mientras la muñeca parpadea, abre la boca y camina en dirección a la jaula cubierta, que ya ha llegado al frontis de la Estación. Javier también estuvo mirándola, hasta que sintió que alguien le tocaba el hombro.
Se dio vuelta y vio cómo el carabinero sonreía, con su luma en la mano y le decía:
- Te creí muy choro vo’ y soi terrible pollo...
Y golpeó en la cabeza a Javier con la luma. Él cayó sin ruido al suelo, su cabeza se había abierto y sangraba copiosamente, un charco de sangre se extendía por el asfalto, justo por donde había pasado la Pequeña Gigante.
Javier vivió, pero sólo por quince segundos más, fue el tacón del zapato de su madre el que atravesó su cuello y terminó con su vida.
Nota: 6, si... claro, con un profe numerario y admirador de J. Guzmán, quién se saca 7s.
95. El Cubo (Cube) (1997)
Este director es inteligente: tengo un cuarto cúbico, luces de colores y actores. Tengo una película hecha. Así de simple, esta película nos lleva a los confines de nuestra propia clautrofobia mental. Es un grupo de personas que de la noche a la mañana está dentro de un cubo enorme, el cual tiene trampas mortales en ciertas habitaciones: ácido, púas, fuego, redes cortantes, sierras... uf, de los mundos más desquiciados de Saw, sólo que mucho (MUCHO) mejor. (Hablando de Saw, fue esta película la que la inspiro más que esta) Yo la vi y quedé tiritando, hay matemática, pero como uno no la entiende lo único que piensa es "bla-bla-bla, con esto vamos a salir del maldito cubo". Pero, en serio, mucho terror, véanla, pero seguro que ya lo hicieron.
Sí, es esa mujer, basado en el Papa Juan Pablo II...
Querido lector, si no ha leído ya el texto al que se referirá en su mayoría esta “apreciación”, lo tendré que interrumpir con esto.
Paula termina de escribir apresurada la entrada que, piensa, podría llegar a ser una de sus más controversiales, claro que no lo piensa en serio, pues sabe que la audiencia de su blog siempre ha sido limitada, en comparación con otros más “profesionales”.
Odia lo que ha escrito y odia que lo haya escrito. Encima de su cama puede ver sus apuntes de cálculo, inmaculados, aún no leídos. Tiene una prueba de esa materia al día siguiente pero ha gastado buena parte de su tiempo en escribir esa entrada. Siente que ahora terminó apresurada para poder estudiar. Sin embargo, su mirada se desvía lentamente hacia su velador.
Encima de su velador, apilados uno junto al otro, están todos los libros de Paulo Cohelo. Trata de luchar contra la tentación pero no puede y toma “El Alquimista”, del cual relee sus trozos favoritos, olvidando el cálculo, el estudio y el hecho de que esté en Química y Farmacia sólo por miedo. Miedo a sí misma y a su propio talento, miedo a que al meterse a Literatura no sirva, cuando salta a la vista que sacaría los mayores honores.
Jaime se da cuenta de que la señorita Paula anda promocionando la entrada de su blog y decide meterse a leer. Cuando termina se da cuenta lo poco que cambia la gente con el tiempo. Así recuerda la primera vez en que se encontró con Paula.
Fue en la estación de metro Santa Ana, Jaime recuerda que ella le dijo que le faltaba mucho por leer, que escribía pero que no le gustaba. Después vino a saber que le gustaba Pablo Cohelo y que no le gustaba la fantasía. Eso último dejó sin habla a Jaime, quien consideró ya un caso clínico su poca separación de la realidad. Lo recordó al leer que consideraba la lectura como una forma de conocerse a sí misma. Sólo entonces pudo descargar su batería de “enojo” contra ella.
Jaime siempre ha creído que la literatura de ficción sirve para el ocio y para abrir mentes, pero nunca han servido para conocerse, pues al único al que se conoce con esto es al autor del libro. El tema importante aquí es con la no ficción y, específicamente, con la filosofía. Son ideas de otra gente y, por lo tanto, tomarlas como algo propio es erróneo y a lo único que conlleva es al sufrimiento al no ser posible pensar por uno mismo.
Jaime ha leído poca filosofía y siempre ha agradecido eso. Lo que ha leído lo ha ido integrando a su conocimiento, que la siente como una fe, pero siempre poniendo restricciones, cosa de no llegar a ser influenciado por esas extrañas ideologías. Ha tomado lo que necesita (ej.: la creación del mundo personal, según Nietzsche), pero nunca dejando de lado sus propias opiniones personales (ej.: Dios tiene un gran sentido del humor).
Paula se da cuenta de la cantidad de comentarios que tiene y, sin tomarlos en cuenta, anuncia un asado para celebrar.
Nota: 5.5, el profe dijo que no se entendía si no leía la entrada del blog.
Antes de que digan algo: Se me acabaron las fotos de Snape, así que acepto FanArt de ustedes (no pienso poner el grosero fanart que hay en Internet) Así que por mientras les pongo la carátula del disco favorito de Snape... creo que es Jazz o algo parecido, pero la carátula la lleva. Bueno, ahora les dejo con el Centralizador, el Pasador de Ramos, el Vampiro más codicioso y blusero del universo (y multiverso) Severus Snape Prince...
Y es por esa razón por la cual los tontos se enamoran y luego se cuelgan... no soportan la felicidad de la aceptación y explotan en mil pedacitos volantes de carne y huesos que se incrustan en las pupilas de transeúntes. Bueno, bienvenidos a mi sección, el lugar en el que reino y hago lo que quiero, claro que ahora tú no puedes hacer lo mismo, por que yo controlo tu vida/mente, etc. Ya saben, los vampiros somos poderosos en el control de la mente... y más aún si somos magos. Manden su fanart(se le olvidó, también recibo fanfic) así como sus preguntas a preguntaleasnape@gmail.com Bueno, vamos a la pega...
Pucha Severitus,
primera vez que me surge una interrogante y tú metido en el mismo pensamiento; así que la gente de regiones es rara.... así que ese deseo de arar tierra, de cavar en las minas... Snape que ignorante eres, lee al menos la época del salitre en Chile y atórate con tus vulgares palabras. Luego respóndeme: ¿Qué pasa con una personita que nace en Santiago, pero crece y es criada en una región, IR de Tarapacá para ser mas exactos? ¿ Acaso tienen las regiones residuos radioactivos o algo? Y respóndeme bastardo, porque hasta que no lo hagas no sabré que soy en realidad.
Pauly
Ayayayayayay... otra vez por aquí, la madame que no quiere que yo le chupe la sangre muy pronto... la mujer más deseada de la Esquina de Fireshanks (no pregunten dónde queda, se volverían ciegos, y no digo que ella sea una mujer de la esquina... bueno...) La mujer que llegó a Santiago tiznada de cobre y salitre después de años de trabajo en el corazón de la mina. La mujer que buscó la oprtunidad en la gran ciudad y lo único que encontró fue a un montón de nerds. Bueno, bueno, bueno, pues pucha paulilla, tendré que decirle la verdad de nuestro sistema mundial, tan podrido que está, como no se debe haber dado cuenta, vividora de "democracia".
Pues bien, para su información, yo no soy un ignorante, al llegar a este país, lo primero que hice fue leerme toda la Historia. Como ustedes son un país tan pequeño y tan... bueno, insignificante para el exterior (excepto para las multinacionales, que los ven como un país al cual se le puede explotar sin repercusiones para ellos. Ver: Pascua Lama) no conocía nada hasta que leí eso. Bueno y, justo que lo saca al plato, tengo que decirle que ese evento salitrero fue el que desencadenó todo mi pensamiento. Es decir, quién en su sano juicio deja a alguien como nosotros (los ingleses) a extraer una materia prima sin impuesto ni restricción. Era obvio que, al ser nosotros tan careros, llegó un momento en que salieron los alemanes con el salitre artificial. Trataron de plantar el salitre artificial para cocecharlo y ahí el suelo se volvió radioactivo. Esa radiación se trasladó a lo largo de la tierra, contagiando a todos los de región y obviando a los santiaguinos pues estaban encerrados en un valle. Y con eso he respondido tu pregunta, cualquier persona que vaya a vivir a regiones y pase más de dos años allá, desarrolla la mutación que ya expliqué anteriormente. Y bueno, si usted quiere saber qué es, usted es una... mujer que es rara. Muy rara.
Gracias por tu pregunta Paulina (aunque sé que no es tu nombre real), espero chuparte la sangre pronto.
Claro, sí... este Snape es incorregible.