Ciencia Ficción sin naves espaciales, ni viajes en el tiempo, ni robots.

49. K-PAX (2001)
A mí me gusta, definitivamente, la ciencia ficción suave (soft SF), esa que no se basa en alta tecnología ni en lugares fuera de la tierra estrambóticos, ni en robots que se vuelven locos, o en nada de lo que se pueda sentir orgulloso Star Wars o Star Trek. Me gustan esas películas que sólo se basan en una cosa, simple, pero no menos complicada. Ciencia Ficción que tampoco significa que sea fácil de entender, sino de la que te hace pensar, como esta o Eterno Resplandor (de la que hablaré porque considero más película de CF que de romance).
Ahora hablemos de esta peliculilla, K-PAX, cuyo protagonista es prot (sí, con minúsculas), que aparece en un aeropuerto y es puesto en un manicomio porque dice ser un extraterrestre venido de un planeta llamado K-PAX. Le gustan las frutas con cáscaras y no puede soportar la luz de nuestro Sol, pues es muy fuerte, por lo que debe usar gafas (las de Bono).
Nadie de los doctores parece creerle, de hecho es bastante poco probable para cualquiera, pero como está en un manicomio, es fácil convencer a los otros pacientes, sobre todo cuando poco a poco empieza a curarlos. Un doctor trata de encontrar a quién está detrás de la figura de prot, pero con el tiempo empieza a notar cosas que lo vuelven menos humano, mientras encuentra actitudes en sus regresiones que indican una vida normal en la Tierra.
Una película que todos deben ver.