lunes, 20 de febrero de 2012

#4 - The Girl with the Dragon Tattoo (2011)

The Girl with the Dragon Tattoo (David Fincher)
¿Qué? ¿Qué hace esta película aquí? Para aquellos que han estado atentos a mis periódicas críticas a las películas en estos últimos días, se habrán dado cuenta que estos 10 Días de Oscar se habrán dado cuenta que sigo un orden no relacionado con la calidad de los productos presentados, sino de manera alfabética. Y si se es aún más perspicaz, uno podrá darse cuenta que hasta el momento han sido sólo cintas nominadas a Mejor Película, de hecho, ese es el sentido detrás de estos diez días en que me sacrifico para entregarles una crítica diaria de las 10 nominadas a Mejor Película de los Oscars del año 2012, que premian lo mejor del 2011. Oh, pero... sorpresa... las reglas cambiaron y ahora sólo tenemos 9 nominados, pero el próximo año podrían ser 6 ó 8, quién sabe, ese número variable vuelve imposible el establecimiento de un nombre fijo para mi sección que le dedica un tiempo a los premios Oscar. Así que he decidido criticar un número X de películas extra, aparte de las nominadas a Mejor Película, siendo X el número de películas que faltan para completar las 10. En este año, fueron 9 nominadas y, por ende, sólo un espacio es necesario rellenar, y será rellenado con la película con más nominaciones (sin nominación a mejor película, obviamente) así que nos hemos quedado con las cinco nominaciones de la última cinta de Fincher. No me van a creer cuando les digo que esta es la mejor película de todas las que voy a criticar, y eso que ni siquiera está nominada. Dios.

Y es algo de lo cual debo ser bastante categórico, de acuerdo a mi lista personal sobre lo mejor del 2011 (que usted puede chequear si baja un poco o si la busca al lado, no tengo ganas de andar linkeando) sólo una de las 9 películas nominadas al Oscar se llevó un puesto en mi lista, y en un puesto bastante bajo. Puedo decir que hay más de quince películas mejores que las 9 nominadas a mejor película de este año, y esta cinta remake/nueva adaptación es una de ellas, siendo completamente ignorada por la Academia a la hora de los quéhubo. De hecho, había ganado cierta tracción y juré que la iban a mencionar después de haber nominado a Rooney Mara al Oscar a la Mejor Actriz Principal (aunque yo la considere secundaria, pero quién pone atención a esas cosas, ¿no?), pero al final no, y así nos quedamos con otra buena cinta de David Fincher ignorada por los Oscars y fuera del merecido premio que tanto tiempo viene mereciendo: el ser reconocido como un maestro de la técnica y de la filmación de películas. Ahora, claro, que con un seudo remake, habría quedado mal... oops, sorry Martin Scorsese.
Ahora, todo este asunto de remakes o no remakes, es que la cinta está basada en la exitosa serie de libros Millenium del fallecido autor Stieg Larsson, que sigue las aventuras de una pareja dispareja, un periodista que siempre busca la verdad y una hacker que no tiene muchas habilidades sociales. Claro que la serie tiene tanto éxito en su tierra natal, Suecia, que ya hay versiones cinematográficas (y en miniserie) de los tres libros que forman parte de Millenium, protagonizados por Noomi Rapace como la hacker Lisbeth Salander, y Michael Nyqvist como el periodista e investigador aficionado Mikael Blomkvist, dando como producto "Män som hatar kvinnor" (2009), "Flickan som lekte med elden" (2009) y "Luftslottet som sprängdes" (2009). Ahora, esto es harina de otro costal, es Fincher y puede que él diga que no le da la gana hacer las secuelas y así nos quedamos con las ganas de seguir inspeccionando en este mundo oscuro y frío del norte de Suecia, lleno de controvertidos misterios y sangre que quiere ser vengada a cada momento.
En esta película conocemos al periodista Mikael Blomkvist (interpretado por Daniel Craig de manera fría y calculadora, como un Bond de pacotilla interpretado por el mismo Bond, lo cual resulta tremendamente interesante al final), que se ve envuelto en un escándalo cuando un reportaje suyo es considerado falso y difamatorio contra un famoso empresario, lo cual deviene en su desprestigio en cuanto a su trabajo en la revista Millenium. Es, entonces, contactado por una viejo patriarca legendario y millonario, interpretado magistralmente por Christopher Plummer, que le pide que resuelva un misterio que lleva sin resolver más de 40 años. Su sobrina, desapareció, y el asesino es alguien de la familia que aún hasta este día sigue torturándolo. Nuestro periodista, antes de ser contratado, fue investigado por Lisbeth Salander, una hacker que lleva años trabajando para diversas compañías de investigación secreta, pero a la cual no le sobran los problemas: el gobierno quiere sacarle su pensión al casi morir su último encargado de ver cómo se adaptaba a la sociedad, y el nuevo no es más que un asqueroso ser lleno de poder por sobre las mujeres, y con ganas de ejercerlo hasta las últimas consecuencias.
Lo interesante empieza cuando las dos historias se cruzan, cuando el misterio se vuelve algo demasiado grande como para ser encapsulado en una sola familia y en un solo lugar. Lisbeth Salander ayuda al pobre periodista sin recursos a descubrir la identidad de un asesino de mujeres en serie, cuya víctima habría sido la sobrina del patriarca. Los problemas de ambos se mezclan al mismo tiempo que sus dificultades y sus pensamientos... hasta sus sentimientos se ven encontrados y tocados, manoseados y pasados a llevar como si fueran juguetes llevados en un remolino, donde uno no sabría distinguir el uno del otro salvo por sus colores y los sonidos que hacen. Pese a ser una pareja dispareja en sus métodos, se unen y amalgaman perfectamente en una entidad que es incapaz de no descubrir qué fue lo que sucedio esa mañana de hace 40 años, y sus métodos son espectaculares. El hecho de descubrir un misterio más grande del previsto es el motor de la película y también su mirada filosófica sobre la vida, como una matrioshka, con problemas dentro de problemas, sorpresas dentro de sorpresas, donde lo impredecible es la ley.
Es fácil decir, entonces, que la película tiene un guión potente en las zonas que mencioné, así como un ritmo de montaje que apoya el frenetismo de las partes en que la investigación se acerca a una conclusión, o cuando las pruebas se acumulan en una dirección fija y clara a la cual seguir, mientras que se pausa y toma sus momentos cuando esto no ocurre, y eso es una señal de una buena y eficiente edición. Sin embargo creo que hay un enorme problema de guión, ritmo y edición en la última sección de la película, no diré qué, pero es una especie de Coda a la trama, que viene a cerrar un punto no muy interesante de la historia inicial de uno de los personajes, pero que se siente que sobra y que tiene mucho mejor lugar en una secuela, salvo por la última escena, que viene a reforzar la idea de la matrioshka o la muñeca rusa, con esas emociones y rostros que vuelven a aparecer, luego de haber estado escondidos momentaneamente por otra muñeca, aparentemente distinta. Esa coda parece de secuela, pues creo que Fincher se estaba ahorrando, de alguna manera, la posibilidad de que él no volviera a la historia y hubiera dejado a la gente esperando alguna secuela que nunca llegaría.
El soundtrack, aunque sigue sin ser mucho de mi gusto, puedo admitir que fue mucho más electrizante que el de "The Social Network" (2010), así que un puntito para los de NIN que supieron superar mi barrera de desagrado a la aceptación leve. La fotografía es estupenda, logrando retratar la frialdad y los tonos azules del norte de Suecia con gran maestría, así como los parajes invernales cuando los personajes se mueven al Norte. La actuación de Rooney Mara es impecable, y creo que nos encontramos aquí con un talento innato a la hora de interpretar papeles duros y poderosos de mujeres, algo que necesitamos en nuestro cine moderno... necesitamos más Lisbeths Salanders... pero no tan violadas. La actuación del resto es correcta con respecto a sus personajes, pero es impresionante la enorme cantidad de talento en los pequeños papeles de la película, un gran trabajo de casting y de actuación.
Pero antes de dar mi veredicto final, tengo algo que decir sobre esta película, y que también me molestó en otra a la cual criticaré, pero no tanto como en esta. La cinta transcurre en Suecia, con personajes que son suecos en su mayoría, pero aún así todo se habla y se dice en inglés, hasta ahí ningún problema... hasta que uno empieza a escuchar y nota que los personajes están hablando con acento como del norte de Europa, acentos suecos para ser más exactos... y eso es completamente inexplicable. Quiero decir, si vas a hacer una historia que transcurra en otro país con gente que claramente habla otro idioma distinto al inglés... hazlo en ese otro idioma, contrata gente que hable ese idioma y hazlo bien. Si no quieres hacerlo por miedo (a tantas cosas puede tenerles miedo, pero no si eres un artista de verdad) es que adaptaras la historia a un lugar donde se hable el idioma en la que la quieres hacer... o no hacerla, rendirte y buscar algo real. Por eso me gusta Tarantino, no tiene miedo a establecer y hablar sobre el idioma en su trama.
Pero pese a todo eso, es una excelente película que emociona en todo sentido, pero que no ganará ninguno de los cinco Oscars a los cuales está nominado. Triste e injusto, pero cierto.
9/10

2 comentarios:

Sam Juliano dijo...

I like this one far less than you, but again I fully comprehend the qualities that have made it such a big hit with so many, including yourself. Much of it is audacious filmmaking and Ms. Mara is very fine.

This is one of your finest essays in this series!

Jaime Grijalba dijo...

Sam: Thanks, it's my favorite as well!